El mendigo.
Herminio es un señor que siempre estaba ayudando a varios mendigos que acogía en su propia casa y recordaba los primeros años que siempre tenía un cariño a un familiar que era su tío Eustaquio.
Le llamaban el mendigo y lejos de allí se domina las cosas del recuerdo que a ese tío suyo no le querían en la familia y el pobre se quedó sin casa.
El tío se salió con la suya, quería que a los demás les surgiera algo como a su tío.
Una mañana muy temprano, los demás que no tenían familia sentían una tristeza de algunas familias se les diría que odian ser pobres y a su lealtad tenían que responder como si estuvieran aislados de sus noblezas y títulos que se señalaban de herir a las personas como aquellos que eran felices de ser pobres y además eran capaces de ser más que ser ricos.
Pero pasaron los años y Herminio se cansó tanto de estar en un palacio viviendo que se fue a pedir y ser quien realmente en su interior sabía que era, El mendigo.
Le llamaban el mendigo y lejos de allí se domina las cosas del recuerdo que a ese tío suyo no le querían en la familia y el pobre se quedó sin casa.
El tío se salió con la suya, quería que a los demás les surgiera algo como a su tío.
Una mañana muy temprano, los demás que no tenían familia sentían una tristeza de algunas familias se les diría que odian ser pobres y a su lealtad tenían que responder como si estuvieran aislados de sus noblezas y títulos que se señalaban de herir a las personas como aquellos que eran felices de ser pobres y además eran capaces de ser más que ser ricos.
Pero pasaron los años y Herminio se cansó tanto de estar en un palacio viviendo que se fue a pedir y ser quien realmente en su interior sabía que era, El mendigo.
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